MANKELL, HENNING
Los electrizantes casos
protagonizados por el ya célebre inspector Kurt
Wallander, de la policía de Ystad, suelen recordarnos que detrás de la
aparentemente pacífica y desarrollada Suecia se ocultan graves patologías
sociales y psicológicas. La leona blanca no es una excepción,
pues al tiempo que nos sumerge en la absorbente investigación de un
horripilante crimen, cuyas implicaciones internacionales Wallander está muy lejos de sospechar, la novela discurre también
por los cauces de la denuncia de la discriminación racial.
Una tarde de la primavera de 1992,
la joven agente inmobiliaria Louise
Åkerblom es brutalmente asesinada en una solitaria y apartada granja de
Escania. Un caso difícil para la policía, pues, a primera vista, no hay un
móvil claro, y todo parece indicar que la muchacha sólo vio algo que no debía
ver. Una vez más, Kurt Wallander
tiene que dejar de lado sus problemas personales (la soledad, la incomunicación
con su hija adolescente o el agrio carácter de su anciano padre) y tratar de
encajar las piezas del tremendo puzzle. Paralelamente, en la lejana Sudáfrica, una organización de extrema derecha,
decidida a dinamitar el proceso antiapartheid,
planea asesinar a algún dirigente político y sumir al país en el caos. Para
ello contrata los servicios de un asesino
a sueldo, que, ayudado por un antiguo miembro del KGB, comienza la
preparación del atentado en Suecia, muy cerca de Ystad...