MIGUEL TIMANÁ GUTIÉRREZ
El presente tema obedece a una motivación personal del autor en base a la reflexión, donde muchos autores han vertido ríos de tinta sobre este tema, sin lugar a dudas este tema apasionante de la vida, vigencia del mensaje de Jesús histórico para nuestro tiempo, su predicación fue motivo de condenación para las autoridades religiosas y políticas de su tiempo quienes lo sometieron a un proceso religioso-político sin precedentes marcado por muchas irregularidades. Este proceso se constituyó en una ilegalidad flagrante y una aberratio iuris, esta reflexión es un aporte suis generis realizado a la luz de la Teología y el Derecho. Jesús, enfatizo la libertad que tiene el individuo en su obrar y no en la norma en sí, esta libertad proclamada por Jesús, deberá guiar el obrar humano del creyente de nuestro tiempo teniendo como fuente por excelencia el amor y el perdón, Jesús, denunció el legalismo opresor de las autoridades de su tiempo, quienes decretaron su muerte, a través de un proceso sumario, juzgado en única instancia. Este juicio se constituyó en una violación de varios principios jurídicos-procesales constituyéndose en un aberratio iuris sin precedentes.
